Un chile Morita es un jalapeño ahumado, muy parecido a un chipotle pero más pequeño y ardiente. La Morita es roja, al igual que los chipotles. Y si se pregunta por qué son rojos cuando los jalapeños son comúnmente verdes, es porque si un jalapeño se deja en la vid el tiempo suficiente, eventualmente se pondrá rojo, al igual que los tomates comienzan verdes y luego se vuelven rojos. También puedes rehidratarlos remojándolos en agua o tostándolos en una sartén seca de hierro fundido para hacer una gran salsa. Solo recuerde proceder con precaución al comer esto; ilumina su boca al entrar, pero pronto verá que después de la chispa inicial se enfría rápidamente a fuego lento. Los chiles Morita secos y triturados son ideales para usar en sopas, guisos, frijoles, chiles u otras recetas que hierven a fuego lento durante mucho tiempo a fuego lento. Solo una pequeña pizca de Morita Chile da un toque a las verduras, carnes y salsas. Los matices afrutados de Moritas son deliciosos con platos de tomate o cerdo. Agregue al chile, salsas y moles. México es centro de origen, domesticación y diversificación de la variedad Capsicum annuum, plantas compuestas por un tallo leñoso, tipo arbusto. Las flores casi siempre son blancas y a veces verdosas. El fruto varía de tamaño, color y sabor, dependiendo del tipo de suelo, clima, etc. El chile jalapeño pertenece a esta especie. De acuerdo con la región, lo llaman chile cuaresmeño, tornachile, acorchado, rayado, tres lomos, candelaria, espinalteco o pinalteco, gordo, guachinango y jarocho. El chile morita es una variedad del chile jalapeño secado y ahumado. En algunas comunidades, estos procesos se llevan a cabo separado por y artesanalmente, pero la mayor producción la desarrollan hornos industriales que secan y ahúman en la misma operación.